¿Qué es transformación digital?

A estas alturas es algo de lo que todo el mundo ha oído hablar. Son dos palabras que oímos a diario: está en noticias, periódicos, artículos, páginas web, redes sociales, etc, pero sobretodo, está presente en las empresas. No sólo empresas como tal, va mucho más allá. Podemos definirla como la integración de las nuevas tecnologías en todas los departamentos de una empresa para cambiar su forma de trabajar. El objetivo es optimizar los procesos y recursos, mejorar su competitividad y dar valor añadido al cliente.

Afecta a cualquier negocio sea autónomo, pyme, multinacional, sea cual sea el sector, la digitalización modifica nuestra forma de vivir y de actuar en cualquier ámbito.

Todos estos cambios o transformaciones en la manera de realizar cualquier tarea nos permite disponer de gran cantidad de información, de comunicarnos e interactuar, de realizar cualquier trámite, de educar, de consumir contenido digital, etc.

¿Cómo afecta a las empresas la transformación digital?

Avanzar como pyme en el mundo actual implica una mentalidad abierta a la renovación. La transformación digital no tiene por qué ser un proceso caótico ni traumático. El miedo al cambio hace que muchas empresas españolas estén perdiendo terreno frente a las que han apostado por la transformación digital. Como consecuencia, esto se percibe en la relación con los clientes.

Gran parte de las organizaciones continúan con procesos de trabajo arcaicos y poco rentables. No se trata únicamente de invertir en material informático de última generación, hacer uso de servicios en la nube o utilizar un nuevo programa. La transformación digital conlleva un cambio en la mentalidad que afecta tanto a directivos como a empleados de una organización, tenemos que salir de nuestra zona de confort. Es una apuesta de futuro hacia nuevos métodos de trabajo que aprovechen todo el potencial de la digitalización.

Incorporar la digitalización en todas las áreas de la empresa genera ventajas a corto y largo plazo. La transformación digital ya no puede considerarse un capricho, o algo al alcance de grandes multinacionales. En España, más del 80% son pymes, y de ellas, más del 70% tienen la necesidad de renovarse adaptándose a la digitalización para ser competitivas.

¿Por dónde empezar? ¿Qué debo hacer para digitalizar mi empresa?

Para comenzar este proceso, no hay mejor forma que la experiencia desde dentro. Es por ello que desde Grupo Nexta vemos interesante ponernos como ejemplo y explicar cómo ha mejorado nuestra organización.

En primer lugar, podemos abordar la estrategia del cambio en un modelo de negocio diferenciando entre:

Transformación: es el paso más importante previo a la digitalización. Tenemos que replantear todos los procesos, recursos y operaciones, para esquematizar la visión del negocio, y que todos los miembros de la organización la compartan. A partir de aquí, se requiere hacer un diagnóstico de la situación actual para establecer objetivos, plazos, tareas, responsabilidades… En definitiva, elaborar un plan estratégico y una hoja de ruta para hacerlo realidad.

Digital: una vez la empresa tiene un funcionamiento interno estructurado y una planificación, necesitamos utilizar las mejores herramientas digitales que nos permitan optimizar todo lo anterior. Se debe concebir como un proceso progresivo acorde a las capacidades y necesidades de cada empresa. Su implementación aglutina todas las áreas y a todos los integrantes de la organización.

La estrategia de toda empresa que decida adaptarse a nuevas tecnologías debe estar dispuesta a trabajar de forma diferente:

-Facilitar el trabajo flexible, adaptado a cada caso

-Liderazgo innovador con capacidad de aportar ideas nuevas

-Mejorar el servicio al cliente y adaptarse a sus necesidades realizando un correcto análisis de los datos

En nuestra organización, hemos apostado por realizar un estudio por departamentos, mediante reports diarios de trabajo. En pocos meses, hemos conseguido disponer de información suficiente para tomar decisiones que han supuesto un cambio estructural que supone mejor funcionamiento y utilización de los recursos. Podemos resumirlo en 4 pilares:

Puestos de trabajo con funciones y responsabilidades concretas: reducción de casos de tareas solapadas y conflictos entre empleados, mayor productividad y organización.

Mejoras operacionales: análisis de costes, compras, ventas, márgenes, reducción de tiempo o recursos en el ciclo de un proceso, cambios en la productividad, etc.

Impacto financiero: eficiencia en tareas administrativas, cambios en los costes de adquisición, mayor capacidad de planificación.

Experiencia del cliente: utilizar tecnologías que permitan que el cliente interactúe de forma ágil, disminuye carga de trabajo administrativa, permite generar gran cantidad de datos en la plataforma y su adecuado tratamiento se traduce en mejores resultados comerciales y facilita la toma de decisiones.

Esto nos lleva al paso siguiente, que no es otro que elegir correctamente estas herramientas digitales con el objetivo de unificar todas estas operaciones, procesos, comunicaciones, etc, de forma que nos hacen más productivos y eficientes. Para ello, hemos pensado en ofrecer un ecosistema realmente centrado en autónomos y pymes, ajustado a sus necesidades, ya sean básicas o con gran complejidad.

Tenemos muchas ganas de presentaros Nexta Digital Solutions, y en el próximo post os explicamos con detalle cómo podemos ayudar a este proceso de transformación a todos los niveles, asesorando de la mano cualquier negocio. La cercanía, un equipo de profesionales con ganas de hacer las cosas bien, y adaptado a tus necesidades son nuestros principales valores.